Durante 2024, desde entre—ríos convocamos a cuidadores y cuidadoras del río Bogotá a compartir cuatro convites de río. Nos juntamos en diferentes lugares de la cuenca alta y media: en la vereda Tenería en Suesca, en el Humedal Tibabuyes en Bogotá, en El Charquito en Soacha, y en el Espacio Odeón en Bogotá, para seguir evocando y tejiendo las redes que componen al río en la cotidianidad de su cuidado y defensa.
En cada punto, y en colaboración con diversos colectivos, iniciativas y acciones de cuidado y gobernanza, creamos un menú de río con alimentos que crecen en las huertas locales, que se sostienen gracias a recetas tradicionales que se han transmitido por generaciones.
Nos encontramos para abrir el apetito, pero sobre todo para abrir el diálogo, buscando generar respuestas colaborativas sobre el cuidado del río a partir de una agenda de preguntas planteadas por los colectivos desde sus lugares específicos en la cuenca y las coyunturas más amplias que implica la interconexión en territorio hidrosocial.
Imprimimos esas preguntas sobre los manteles para poner al río en el centro de la mesa. Las conversaciones alrededor de estos manteles parlantes –una metáfora que nombra el acto de comerse al río para así evocar sus memorias, problemáticas y posibilidades– nos permitieron activar, revivir y reafirmar nuestras conexiones con el río Bogotá.
En cada convite, nos sentamos entre diversos colectivos y organizaciones sociales y comunitarias, actores institucionales, investigadores, veedores ambientales, y sectores privados, para juntos pensar y responder preguntas diversas, sobre las formas de protección ambiental, las relaciones ecosociales, cómo la educación y el arte nos conectan con el río, y las formas de organización social que fomentan esa relación.
Así, los convites crearon una forma de reunir a diferentes actores comprometidos con la cuenca, abordar las diferencias y tensiones que existen entre modelos de conservación y gobernanza. Con esto, buscamos difundir una cultura de cuidado hacia el río, expandir la red de cuidadores a escalas mayores, proponer acciones para fortalecer estos procesos de cuidado y amplificar una cultura ciudadana ribereña.